En nuestras instalaciones respondemos por dos tipos de garantías:
Garantía de los componentes contra defecto de fabricación.
Garantía del montaje e instalación contra defecto de diseño y/o ejecución.
Garantía de los componentes contra defecto de fabricación
Desde el 1 de enero de 2022 en el Estado Español entró en vigor la normativa aprobada en abril de 2021, en la que los dos años de garantía mínima legal de los bienes de consumo, pasa a extenderse a tres años de garantía mínima legal.
En particular, en una instalación fotovoltaica la garantía contra defecto de fabricación es la siguiente dependiendo de los componentes, pero siempre con un mínimo de 3 años:
Placas Solares, Ulica y Sunrise tienen 25 años en potencia y 10 años contra defecto de fabricación en la calidad estándar.
Estructuras, nuestro fabricante Valenciano de referencia Sunfer Energy, da una garantía estructural de 25 años y garantía anticorrosión de hasta 25 años salvo en condiciones de ambientes agresivos como el salino:
Inversores, dependiendo del fabricante la garantía va de los 3 a los 15 años: Voltronic y Outback 3 años, aunque dependiendo del modelo este último puede llegar a 5 años ampliable; Schneider Electric, Deye Sun, Solax y Victron 5 años; Fronius 3 años, ampliable a 7 con solo registrar gratuitamente el producto en Fronius Solar. Web; Huawei y Studer 10 años.
Baterías, las baterías de litio Weco, Pylontech y BYD tienen 10 años de garantía, y la de plomo ácido Tab, Ultracell (gel) o Cynetic 3 años.
Resto de componentes no fungibles 3 años.
Garantía del montaje e instalación contra defecto de diseño y/o ejecución
El montaje e instalación de todas nuestras instalaciones tiene una garantía de 12 meses a contar a partir de la puesta en marcha OK contra defecto de diseño y/o ejecución. Por las características de estas instalaciones, si hemos cometido un fallo humano, este se pondrá en evidencia al poco tiempo de la puesta en servicio del sistema y será resuelto a la mayor brevedad .
La monitorización remota nos permite a los instaladores llevar un exhaustivo seguimiento del correcto funcionamiento de la instalación, para entre otras cosas poder detectar posibles fallos que normalmente se reflejarán en una pérdida significativa del rendimiento.
Acompañamos al cliente-clienta en todas las fases del proyecto, y evidentemente tras la puesta en marcha de la instalación, lo seguimos haciendo.
Tras la puesta en marcha, realizamos un seguimiento remoto a través de la monitorización para asegurarnos de que todo sigue funcionando correctamente.
Mantenemos contacto con la clienta-cliente resolviendo a la mayor brevedad cualquier duda o incidencia que se pueda producir tras la puesta en marcha.